Blue Control es un tratamiento anti reflejante que neutraliza parte de la dañina luz azul emitida por pantallas planas, luces interiores de bajo consumo y luz solar.
Las lentes con tecnología Blue Control neutralizan la luz azul previniendo la fatiga y el estrés visual y reducen el brillo para una visión más cómoda y relajada además de aumentar la percepción del contraste ofreciendo una visión más natural del color. Blue Control no neutraliza el 100% de la luz azul, ya que la luz azul es necesaria para mantenernos despiertos y es muy importante para aumentar y mejorar la percepción del contraste. Además, Blue Control neutraliza la luz azul sin necesidad de filtros amarillos, lo que permite proteger la vista, manteniendo la estética en las lentes.
Para promover una vida y una visión más sana en la actual y cambiante sociedad digital, se cree que es necesario incrementar la conciencia sobre los riesgos potenciales de la luz azul, promover el uso responsable de dispositivos digitales y reducir la exposición a la luz azul durante todo el día. Blue Control ha sido desarrollado para ayudar a cumplir estos objetivos.
¿Qué pasa con la luz azul?
La luz azul, también conocida como luz visible de alta energía, procede del extremo azul del espectro visible. Las longitudes de onda de la luz azul visible están comprendidas entre los 380-495 nm. Es la luz más fuerte del espectro visible que entra en nuestros ojos a través de la córnea, el cristalino y va directamente a la retina.
Las fuentes de luz azul son el sol, las luces de bajo consumo, todas las pantallas planas de nuestro alrededor, como televisores, monitores, tablets, teléfonos móviles y otros aparatos digitales. La luz azul en sí misma no es peligrosa. Lo peligroso es la sobreexposición a la misma debido a la cantidad de horas que pasamos frente a todo tipo de dispositivos.
Las investigaciones realizadas han demostrado que más de una tercera parte de las personas adultas emplea entre 4 y 6 horas al día en el uso de aparatos digitales, mientras que el 14% emplea entre 10 y 12 horas al día. Por lo tanto no sorprende que cada vez más gente padezca molestias como: ojos rojos, irritados o secos; visión borrosa, cansancio o dolores de cabeza.
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