El grupo de autoayuda para celíacos se reunió este martes pasado. Amelia Álvarez, del Área de pensiones, y Walter Alonso, de discapacidad, afirmaron que tanto los celíacos como los galactosémicos son considerados discapacitados viscerales y que analizan la posibilidad de incorporar un psicólogo para sumar a la información nutricional que se brinda.
“Debemos tener 5 o 6 nuevos celíacos, nos ha impactado cómo se está incrementando la cantidad, quizá porque antes no se hacían los estudios pero cada día aparecen más”, se sorprendió Amelia, quien comentó que están “trabajando en forma conjunta con Walter (Alonso), que es el Director de Discapacidad, porque la celiaquía si bien para algunos médicos no es discapacitante, para las Pensiones No Contributivas están considerados, tanto los celíacos como los galactosémicos, como discapacitados viscerales”, los que –según la funcionaria- se encuadran en tal categoría a aquellas personas que debido a alguna deficiencia en su aparato físico, están imposibilitadas desarrollar sus actividades con total normalidad, por ejemplo, el cardíaco o el diabético, que, pese a tener la mayoría de las veces su total capacidad intelectual, sensorial o motora, su problema les impide desarrollar su vida con total plenitud.
Asimismo, recalcó que la enfermedad no está relacionada con la edad, ni con otros condicionamientos. “Hay bebés que han nacido con celiaquía, y hay personas que con 50 o más años de edad recién se la descubren; es muy corriente que la gente empiece a decir ‘yo lo que tengo es colon irritable’ y cuando se comienzan a hacer los estudios detectan que es una celiaquía”, dijo Álvarez.
A su vez, explicó que “la función de este tipo de reuniones es nuclearlos a todos, cuentan las experiencias de unos a otros, se apoyan, intercambian información sobre el manejo de las harinas”, entre otras actividades. Para conformar un grupo de trabajo bien completo que cubra los intereses de los participantes, Amelia afirmó que analizar “de ser necesario incorporar la actuación de un psicólogo”, más allá de la actual apoyatura profesional que brinda la Lic. en Nutrición Inés Bergonzelli.
Por su lado, Walter Alonso comentó que “la Provincia les ofrece a las personas con celiaquía una tarjeta de alimentos, un subsidio por mes, y desde el Municipio, se los ayuda con una bolsa de alimentos específicos” y especificó que “en este momento varía entre 35 y 40 personas que retiran la bolsa por mes”.
Prensa Municipalidad de Bolívar